¿Os imagináis tratar con los niños sin perder las formas, sin levantar la voz, sin enfadarnos poniendo el grito en el cielo? Si lo consiguiéramos, viviríamos más tranquilos, además, y eso es aún más importante, los hijos podrían aprender de nosotros a regular su propia tensión en momentos de contrariedad, porqué ellos aprenden de lo que hacemos y no de lo que decimos que hay que hacer. ¿Cómo aprender a educar sin gritar?
Además de las conferencias y talleres, lo podéis hacer a través del libro que lleva este nombre.
Explica los aprendizajes de mi experiencia como madre, educadora y mediadora de conflictos, un compendio de herramientas para facilitaros la convivencia diaria con los hijos.
Si vuestro mayor objetivo como educadores es dotar a los niños y niñas de herramientas que les permitan ser personas libres y responsables, este libro os dará las claves.
Lo he escrito a raíz de las demandas reiteradas de los padres y madres que asisten a las conferencias y talleres, que deseaban ampliar la formación y disponer de material escrito. Gracias por vuestro interés y por animarme a escribir un libro que quiere ser útil a todas las familias que todavía no han podido venir.